En este juego de la conciencia… donde a veces se oculta y a
veces se revela… son en eso momentos donde “te cae el veinte”, donde quitas una
capa más de los bloqueos que te alejan de tu esencia, que son los regalos más
grandes que puedas recibir.
Mientras te mantengas con tu intención más elevada,
conectado a lo que realmente quieres, el camino del despertar se estará
mostrando a cada paso. Sólo mantén tu
corazón abierto.
Que bendición es hacer lo que hago, porque en este camino
donde muchas almas hermosas me acompañan, crecemos juntos, despertamos juntos y
disfrutamos juntos.
Un súper veinte me cayó en un taller que di con dos almas
hermosas… trabajando con la Humildad y soltando todo lo que nos aleja de ella,
porque es ella la que nos conduce directo a nuestro corazón.
Había preparado mis clases de todo el taller y el tema del
último día era “Celebrando tu empoderamiento a través de la Humidad” Había
planeado una clase de mucho poder interno, trabajo con el Chakra de poder
personal, Manipura Chakra… balances de brazos, trabajo abdominal… en fin… mucho
esfuerzo!!!! Pero la noche anterior, en una meditación donde conectábamos con
nuestra diferentes voces… entre ella la del controlador…. Me di cuenta que tan
presente estaba el “controlador” para sentirme empoderada. Esa máscara, ese
ego, que nos hace sentir que no somos suficientemente buenos y tiene que
“hacerse cargo de todo” para que tengamos éxito/plenitud. Para que logremos
nuestras metas y objetivos. Porque a partir de ahí es que el ego nos define.
Me di cuenta lo relacionado que tengo el éxito/plenitud a
trabajo duro y esfuerzo. ¿Dónde estaba entonces lo que enseño?... ¿cómo lo
estoy aplicando a mi vida?... ¿por qué sigue tan arraigado?....
Pidiendo ayuda, en ese momento tome el libro de Marianne
Williamson… al azar abrí el libro y esto fue lo que resaltó a mi vista:
No pidas un carrera
brillante, pide que se te enseñe el brillo de tu interior. El reconocimiento
libera nuestro luz y la deja expresarse.
En vez de expandir la
capacidad de conseguir algo más, expandamos nuestra capacidad de recibir lo que
ya esta en nosotros.
Cuando abrimos nuestro
corazón nuestros talentos y dones florece. Entrega esos dones al servicio de la
sanación del mundo.
Ya eres esa persona
poderosa en cualquier momento que decidas serlo. Todos tienen poder, ninguno
tiene poder especial. Todos somos especiales. Nadie tiene más potencial que
otro para irradiar la luz de la conciencia. El poder no es nuestro, es el espíritu
que nos ilumina.
No esperes que el
mundo te de permiso de brillar… brilla con toda tu intensidad.
Estas palabras me inspiraron a dar un clase de lo que
llamamos en Anusara “Energía Orgánica” donde desde tu centro expandes en todas
direcciones, dejas que la luz de tu interior, brille con toda su intensidad… y
lo más importante que no es desde el esfuerzo, sino desde el reconocimiento,
agradecimiento y entrega.
El mejor regalo que puedes entregar al mundo es tu luz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario