martes, 8 de septiembre de 2015

¿Quién eres? ¿Qué te ha traído hasta aquí?


¿Cuántas veces no pasamos por una situación, circunstancia en nuestra vida que quisiéramos no estar viviendo? O quisiéramos borrar de nuestra historia? 

“Absolutamente todo lo que hemos vivido en nuestra vida es lo que nos ha traído a donde estamos ahora."

La verdad, la por primera vez leí esta frase, no sabía cómo acomodarla en mi corazón. Pero la he contemplado mucho y aunque me tomó mucho tiempo y mucho trabajo de sanación, hoy puedo agradecer cada situación, experiencia, persona, aprendizaje que se cruzó en mi vida, porque todo eso es me ha traído a donde estoy hoy y lo que me ha hecho ser lo que soy.  Incluso esos momentos más difíciles de mi vida que pude etiquetar como “problemas” o pensar “porque a mi” fueron claves en  mi vida. Se convirtieron en los parte aguas para un mayor crecimiento.

Dr. Wayne Dyer escribió “Cada cosa que pasó en tu vida puedes: o sentir lastima por ti mismo o tratarlo como un regalo. Puedes verlo como un obstáculo para tu crecimiento o como una oportunidad para crecer más, tu elijes”

Así que está en nuestra manos todo el tiempo decidir con que lentes queremos ver lo que nos sucede. Y para mi ha sido un gran aprendizaje el poder reconocer que todo lo que ha sucedió en mi vida, ha sido parte de un perfecto Plan Divino para traerme hasta donde estoy ahora y que todo ese dolor intenso, momentos de desesperación, incomprensión, etc…. justamente fueron los que me llevaron a una búsqueda profunda. Son esos momentos que te hacen voltear a ver a ti mismo y te hacen recordar de que estas hechas. Esos momentos con lágrimas en lo ojos, con el corazón a flor de piel, donde pareciera que no tienes a donde más voltear, te lleva la mirada hacia adentro y ahí en medio de todo el dolo puedes reconocer una paz dentro de ti.

Así que tenemos todo el tiempo la capacidad de elegir. Y yo se que se puede decir muy fácil pero nuestra historia está llena de gente inspiradora que a decido usar sus problema e incluso tragedias para crecer más o para crear cosas extraordinarias, seguramente si te tomas unos minutos para pensar, vendrán a tu mente 2 o 3 personas que tú conoces.

Así que nuestra historia nos ha traído hasta donde estamos ahora y en el plano manifestado nos ha hecho ser lo que somos… pero ojo de dejar que esas historias te definan y  te marquen. Hay que soltar todas las etiquetas de: “yo siempre” o “yo nunca” y sobre todo “yo soy esto o aquello”… recordar el mantra So Ham “Yo soy” solo “Yo soy” que nos recuerda que somos un fragmento del alma universal… y que cada vez que ponemos etiquetas a ese “Yo soy” como por ejemplo: miedosa,  enojona, o yo no soy buena para esto o aquello… estamos alejándonos de nuestra esencia. Como podemos aprender a quitarnos todas esas etiquetas que nos pusieron o nos pusimos y muchas veces llevamos cargando por años y lo único que hacen es limitarnos. Suelta todo aquello que te limita, ábrete a la mejor versión de ti mismo.

martes, 4 de agosto de 2015

Cuáles son nuestra prioridades?

Espero que te encuentres muy bien y pasando un lindo verano. Yo acabo de regresar de un viaje lindo en familia y después me fuí yo sola a un maravilloso taller: "Yoga of the Mat: Purpose, Yoga and Action" y realmente fueron días que me nutrieron mucho. Haciendo yoga, meditando 1 hora en la mañana y 1 hora en la noche, contemplando, escribiendo, estando en la naturaleza. Y es impresionante como me cayeron tantos veintes que quiero compartir contigo.

Me impacta como podemos estar tan metidos en nuestra vida, nuestras responsabilidades, tareas, planes... que se nos olvida dar ese paso hacia atrás, ese paso atrás tan importante que nos ayuda a ver la perspectiva completa. Por que a veces nos olvidamos de lo más importante y en el día a día, en cumplir con todas nuestras responsabilidades, empezamos a poner las prioridades al revés.

Lo que sentí estos días fue, que aunque ni un sólo día he dejado mi práctica personal, mi tiempo para meditar (aunque sea a las 5 de la mañana), inclusive eso lo empiezas a hacer de una forma un tanto automática. Como si estuviera robando clandestinamente minutos a mi día. Y lo hago porque se perfectamente que mi práctica es mi fuerza, sin ella soy como un coche sin gasolina que no puede andar. Pero no es tanto que haces, sino cómo lo haces Nuestra Sadhana requiere el 100% de nuestra atención, con la mayor cualidad posible, pero sobre todo con todo nuestro corazón, recordando una y otra vez que es nuestra prioridad, que es para lo que venimos a éste mundo. No a ver cuántas cosas logramos, cuánto dinero ganamos, cuántos sueños cumplimos.

 Cuantas veces no se escabullen en mi práctica, pensamientos de "que es lo que tengo que hacer hoy?", "me falta hacer esto o aquello", "tengo esta idea"... etc. Y sin querer.... pum! de repente ya te fuiste ya estas en otro lado, como agua entre mis manos se me escapan esos minutos sagrados.

¿Que es lo más importante para ti? ¿Cuál es el propósito de nuestra vida?... podemos hacernos estas preguntas una y otra vez. La invitación del yoga es recordar que venimos a experimentar lo que verdaderamente somos: dicha, luz, libertad, conciencia. Puede sonar trillado? si!... pero es real y que tanto pongamos no sólo nuestra atención sino todo nuestro corazón en eso, va a ser la diferencia de como experimentamos el mundo y qué en nuestra vida tiene prioridad.

Y no digo que nos olvidemos de nuestra vida diaria, al contrario, como podemos hacer todo lo que tenemos que hacer, desde esta consciencia, como podemos permanecer en ella sin importar las múltiples actividades, distracciones que tenemos en este mundo.

Cómo nos ahogábamos en un vaso de agua cuando éramos niños? como ve nuestro Ser Superior que nos estamos ahogando en un vaso con agua con los problemas que consideramos ahora tan importantes? si tuviéramos esa supraconsciencia, sería con polvito que podemos quitar de un soplido. Permaneciendo siempre en la luz de nuestra conciencia.